Dedicarme exclusivamente y totalmente a mi carrera, implicaría como lo mencioné anteriormente, alejarme de lo que me apasiona. Y eso, estoy estudiándolo y exáminandolo minuciosamente. Sé, que en la vida a veces se deben tomar decisiones y realizarles tajantemente, sin pensarlo, para no mirar atrás y arrepentirse, posteriormente; pero, es que algunos quizás no entienden, que leer es mi vida y lo que me tranquiliza espiritualmente. Es como un medicamente que me ayuda a olvidar problemas y a sentirme más util, segura, y eficaz en el mundo. No podría dejarlo.
El libro se llama "El Aprendiz" y es creo idóneo en mi situación.Y es que a veces también pienso, que el Todopoderoso me ayuda a elegir esos libros tan acorde a el estado de humor o a el momento que transitoriamente paso y me da una llamada de atención para volver a la normalidad, ponerme las pilas, y seguir esforzándome a el máximo como acostumbro hacerlo.
La historia es simple a primera instancia. Honguito, un niño japonés, se encuentra obsesionado con aprender la técnica de la finísima cerámica de celadón junto a Min, su maestro. Con un lenguaje, simple, entendible y estético a el mismo tiempo, Linda Sue Park entrega a el mundo otra historia de vida, que esperemos supere a las que he tenido la oportunidad de revisar y que sobre todo, me convenza a mí, que todo es posible con esfuerzo, con perseverancia y con confianza en uno mismo. Aún cuando te encuentres en tinieblas, preocupaciones y crisis existenciales...
Esperemos que "El Aprendiz" lo logré. Y de paso, también espero que después de la tormenta, cuando menos lo espere, salga en mi vida, el Sol. Cité esta frase de la nueva canción de Shakira y que aquí comparto con ustedes.
¡Nos vemos cuando "El Aprendiz" sea finalizado, amigos!
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