Sin embargo, no dejaré de lado a mi desafío y seguiré cumpliéndolo con optimismo y fuerza de voluntad. Estoy a ochenta páginas de finalizar el "Diario de Ana Frank" y si me piden decribrirlo sin lugar a dudas utilizaría las tres palabras que le dan el título a esta nota. ¿Por qué? He aquí mi respuesta.
ESPERANZA: El contenido de las cartas que esta adolescente escribe desde su escondite distan mucho a lo que pensé sería este diario. Como puntualizé en la nota anterior, en sus manuscritos solo hay cabida para la esperanza de salir de el "Anexo Secreto" y empezar una vida mejor desde cero.
Ana es una joven admirable por poseer ese don de ver lo hermoso en una situación trágica.
Otto Frank, Margot Frank y Ana Frank